El joven director de orquesta venezolano Gustavo Dudamel electrizó el jueves en la noche con toda su fogosidad a la prestigiosa Orquesta Filarmónica de Viena, durante su noveno concierto de verano en el marco histórico del Palacio Imperial de los Habsburgos en Viena, en Schönbrunn.
En un concierto transmitido en directo por televisión a 60 países -de Alemania a Venezuela pasando por Isla Mauricio, China, Japón o Sri Lanka- a través de la European Broacast Union (EBU), Gustavo Dudamel, de solo 31 años, confirmó así su destacada posición en la escena musical internacional.
En Schönbrunn, ante 100.000 espectadores, demostró una vez más su creciente madurez, exhibiendo un gran sentido de la música, de la partitura y la dirección de orquesta raros en alguien tan joven, a lo que se suma su gestualidad de un dinamismo rara vez visto.
Bajo el tema "Danzas y Olas", Gustavo Dudamel y la Filarmónica de Viena interpretaron obras de los compositores rusos Piotr Illich Chaikovski, Modeste Moussorgski y Alexander Borodin, así como del compositor alemán Richard Strauss, del italiano Amilcare Ponchielli y del francés Claude Debussy ("El Mar").
Dudamel, considerado un prodigio de la música, se formó en el corazón de El Sistema, un programa de educación musical creado en Venezuela en 1975 para las clases más desfavorecidas por el compositor venezolano Juan Antonio Abreu.
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